Desde mi azotea.

El círculo social mágico/trágico.

Un poco de la interesante historia reciente.

Carl Marx  coincidía con Hegel, en que cada periodo en cada cultura, tiene un carácter propio, de manera que las únicas leyes verdaderamente universales en la Historia podrían ser las concernientes a los procesos de desarrollo  por los que una etapa da lugar a la siguiente. Dividió someramente la historia en las fases asiática, clásica, feudal y “burguesa” o capitalista y mantuvo que cada una tenía que dar paso a la siguiente.  Se esperaba, que el capitalismo daría paso,  inevitablemente al comunismo (pag150-151 [C 1])

Marx predijo  muy confiado, que el capitalismo llegaría a ser más y más inestable económicamente, que la lucha de clases entre burguesía y proletariado se intensificaría, con un proletariado cada vez más pobre (la clase “media” era casi inexistente) y un capitalismo cada vez más presionante, hasta  que éste, el proletariado, explotaría en una gran revolución social.  Los trabajadores explotados y alienados, tomarían el poder e instituirían la nueva fase comunista de la Historia. (págs. 78-80 [IA], 147-52 [MC, C1], 194 [MC], 207 [MC], 236-8 [SF].

Lo cierto y contrastable es, que esta predicción de Marx no se cumplió. Nunca sabremos lo que habría sucedido si las predicciones de Marx se hubiesen cumplido (espero que ningún lector se imagine ni por un momento que Marx se refería al Comunismo, con lo que se “montó” en Rusia, China y países satélites, pues ese no era el comunismo al que se refería) ¿Donde estuvo el error de Marx?  Desde mi azotea, intuyo que sin lugar a dudas el problema de Marx para profetizar ese nuevo paso de la sociedad, fue que no era psicólogo, o no sabia psicología, o no sabía la suficiente.

A Marx que era un buen economista, sociólogo (y además humanista, aunque a algunos le pese) le faltó interpretar correctamente, pienso que en este caso no se subió a la Azotea, los más que previsibles comportamientos humanos.  Si hubiese tenido en cuenta como está distribuida la sociedad y cuales son sus puntos fuertes y débiles, hubiese acertado con lo que iba a suceder, muy alejado de lo que él preveía.

El aquí y el ahora

Veamos, en un primer análisis, Marx estaba acertado al distribuir básicamente la sociedad en dos grandes grupos o estructuras sociales: lo “ricos y poderosos”, es decir los “Fuertes” (Fu) y los pobres proletarios, es decir, los “Débiles” (De)  Marx se equivocó en las capacidades de los dos grupos, infravaloró a los Fu, y sobrevaloró a los De.

Los Fu, son pocos y fácilmente se ponen de acuerdo.  Los De, son muchos y desorganizados, en vez de “individuizarse” (crecer como personas pensantes) se “individualizan” (ojo al matiz) disgregándose, y cada cual (salvo excepciones), va a la “suya”.

Tal como veo la película desde mi Azotea, los Fu se lo vieron venir, y supongo que llegaron a una primera conclusión,  “estos” (los De) se nos van a rebotar porque los estamos “exprimiendo”, y la cosa se pone tensa.  Además, podemos imaginarnos la situación, había llegado la revolución industrial, las posibilidades de producción eran inmensas, pero si los que son muchos, no pueden comprar, ¿de que nos sirve producir y producir, que es como nos hacemos más ricos (aún)?  Imagino que pronto se pusieron de nuevo de acuerdo. “Hemos de lograr que estos “chicos”, antes que se reboten, amansarlos ¿cómo?  Ahí los Fu, sí se subieron a la Azotea,  conclusión: les facilitamos el acceso a disponer de más dinero y esto les amansará (sabia decisión, estos si sabían de psicología)  Pongamos como ejemplo el tan conocido, y no sé por qué tan bien valorado caso del Sr. Henry Ford y su filantrópica decisión de  facilitar la compra de unos de sus “caris-máticos” modelo T.  “Querido empleado de Ford, aquí tiene usted este magnifico coche, puede llevárselo y disfrutar de él, no se preocupe si no tiene dinero, le  descontaremos un pequeño plus de su nómina y en X (equis) años lo habrá pagado  ¡que me dice!!” Reverencias, genuflexiones, eterno agradecimiento y… ¡eterna deuda!

He puesto el ejemplo Ford, pero esto es lo que pasó en muchas otras, por no decir todas las grandes empresas y áreas de productos de consumo y vivienda. Los Fu habían encontrado el camino y el proletariado fue desapareciendo (no los pobres) nunca en su totalidad, y empezó a generar una nueva clase social: ¡la Clase Media!  Ésta podía tener casi de todo, aunque casi nada era suyo. Pero como sólo se vive una vez…

Y a renglón seguido, y como las empresas su función (de funcionalidad) era  la de producir bienes, idearon otro invento, bueno, el invento ya hacia años que funcionaba, pero ahora se le asignó una nueva función, ¡la de las hipotecas y créditos!  Y ya tenemos creado el mundo de la banca “moderna”, por supuesto, también propiedad de los Fu.

Y así se van urdiendo el círculo ¿mágico?

Ud. compra, el Fu vende de “todo”, allí donde ve negocio lo invade y se apodera  (fábricas y corporaciones, etc.)

Ud. De, si no tiene dinero, se lo dejamos, eso le ata al trabajo, y además aparecen los medios de comunicación, por supuesto en manos de los Fu y le incito al consumo ¡venga compre! no se prive de nada.  Los De, se hipotecan y “rehipotecan” consecuencia: aparecen los dolores de cabeza, riñón, corazón, depresiones, etc. eyyyy!!!,  ahí hay otro negocio, y los Fu se lanzan a la creación de la  “nueva” industria farmacéutica. ¡Lo que nos faltaba!!

Incitación a la compra ➡ Debilidad= Banco= hipoteca =trabajo-dependiente ➡ enfermedad = negocio farmacéutico. Y sin ánimo de ponernos en tono gris,  el negocio de las funerarias ¡finito!!

PUBLICIDAD ➡ PRODUCTOS Y SERVICIOS ➡ COMPRA COMPULSIVA ➡ HIPOTECAS ➡ BANCOS ➡ ENFERMEDAD ➡ IND. FARMACÉUTICA…

En honor a la verdad, cierto es, que la industria farmacéutica ayuda a vivir más años y mitigar muchos dolores. Pero tal como lo estamos viendo, dudo que ese sea su “gran” objetivo. Entonces ¿cuál es su gran objetivo?.